Hay cosas que no salen, y que ya no saldrán. Proyectos rechazados, o que han languidecido tras un espeso e incómodo titubeo, o que se han eternizado por incomparecencia de una de las partes. Las culpas se reparten: puede que el autor no haya estado a la altura, puede que el cliente esperara otra cosa, quizá no hubo feeling, nadie acertó.
Un montón de ideas y bocetos que se acumulan en carpetas y acaban criando polvo. ¿Por qué no enseñarlas? Bueno, pues básicamente porqué una gran parte de ellas son ideas o dibujos susceptibles de ser reciclados en cuanto se presente la menor ocasión, un nutrido stock del que echar mano en momentos de apuro. Pero algunos casos son tan específicos que queda demasiado claro que no hay, no habrá, más recorrido.
Son espinitas clavadas, la verdad, y qué mejor manera de cerrar la herida que sacarlas a la luz. Pues esto es lo que va a ser El Libro de las Ocasiones Perdidas.
Y empiezo por una reciente, de 2013. Es un boceto de historieta a partir de una canción de un músico norteamericano, del que soy fan desde hace años. Habíamos trabado contacto a través de un amigo común y surgió la posibilidad de colaborar. Primero fue el encargo súbito de una portada de CD. Un auténtico caramelo, pero yo estaba demasiado liado y me resultaba imposible cumplir con las fechas, y la acabó haciendo (magnífica, por cierto) otro dibujante. Gran Ocasión Perdida, porqué el disco en cuestión es buenísimo, y su directo (como pude comprobar en vivo), la bomba. Pocos meses después se regrabó una de las canciones de ese CD, y se pensó en algún tipo de edición. Ahí sí que entré al trapo, y esto es lo que hice. Algo así como un storyboard adaptable a usos diversos (desde libreto de disco a videoclip, por ejemplo). Pero no hubo edición. Al final no hubo nada. Snif!
Pues la idea es buena y el título, mejor. El boceto de esta primera historia tiene ecos (para mi) de tus videoclips y animaciones con Los Planetas. Cuantos recuerdos...
ResponderEliminarSe ve prometedor y solo es un boceto, no te digo lo flipante que quedaría ya con trazo y color definitivos.
ResponderEliminarLa idea del rescate de ideas desechadas me gusta, es bueno ya que vemos lo que pudo haber sido y no llego a ser finalmente, yo particularmente tengo una espinita clavada con la historia de Meteor.(a tenor de lo que vi en la expo de Valencia y en alguna entrevista de alguna publicación) no se por que no la terminaste se veia muy molona y con aquel estilo y todo aquel halo de misterio. Lo mismo que lo de la princesa de Éboli.
Me imagino que en tantos años tendrás un buen cúmulo de bocetos, ilustraciones e ideas guardadas en tu particular cajón de sastre (o desastre, nunca supe como es esta acepción). Me imagino que también tendrás ilustraciones que has hecho para ti o de encargos particulares , no estaría mal que las viésemos por aquí.
Yo por mi parte voy descubriendo , colaboraciones de tu pasado o portadas de libros que no tenía vistas y que me fascinan , también me pregunto por que no son conocidas y me fijo en tu evolución gráfica desde tus comienzos y tus etapas. Hay cosas inencontrables por lo antiquísimas y poco difundidas, pero mi emoción aumenta cuando encuentro algo , por abigarrado como tu lo definías que era, pero se ve la pasión que le ponías y como el afán de superación te ha llevado tan lejos.
¡El libro de las ocasiones perdidas y reencontradas! Gracias, Max.
ResponderEliminarFantastic. Tot allò que no va poder ser es fa realitat.
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